Expectativa vs Realidad

 Es incluso gracioso como dos términos marcan tantas experiencias desde el resultado de un examen escolar hasta la reacción de las personas ante cualquier noticia o la misma suerte personal. 

Hay quienes siempre tienen expectativas bajas todo el tiempo y de esa manera es difícil lastimarlos de cualquier manera. Pero los que siempre tienen altas expectativas son quienes más sufren, esperando lo mejor y teniendo algo tan agridulce.

Claro, no me refiero necesariamente de expectativas hacia la reacción de la gente, sino hacia lo que acontece a nuestro alrededor, como esperar que un platillo cuya receta hemos hecho siempre, todo el tiempo salga bien o que nuestro programa favorito conserve una buena trama.

Sin embargo, estas también aplican a la vida misma, ¿Quién no llegó a soñar de niño con una vida perfecta? Yo lo hice tantas veces, pensando en viajes, la pareja perfecta, esa ilusión de una vida sin contratiempos, una vida en la que cualquier plan que uno se proponga salga bien, expectativas tan altas que resultan mera fantasía.

¿será tan malo esperar algo favorable todo el tiempo? A veces el optimismo muere, a veces es cansado esperar lo mejor, tanto que bajas tus expectativas al mínimo, esperando en el proceso no caer en la total decepción. Por desgracia, la vida ha demostrado que puede ir a peor.



Au Revoir!!

Publicar un comentario

0 Comentarios