Me di cuenta de que cada vez escribo con menos alma, como que una parte de mí se ha borrado. Tal vez antes escribía como una completa enamorada, como una loca bohemia que iba y venía por toda la ciudad, que si estaba de humor se iba por días y hasta meses de acá.
No es que este menos enamorada, es que algo en mi cambió. No soy yo, soy otra, me veo lejana, me veo como una imagen institucional de mi misma. Cada sentimiento que llegué a irradiar a través de las palabras aquí plasmadas, simplemente ya no existe. Ni espejismo, a lo mejor fue una fase.
Hace mucho que dejé de ser esa bohemia, ahora soy una devota madre y casi esposa. Siempre he sido fiel a mis momentos, ahora soy en su totalidad fiel a mi faceta de madre y casi esposa, ya no sé qué sigue.
¿Cuál es el próximo peldaño? Y no me salgan que ser abuela, mi bebé es muy chico y ni de broma me veo teniendo nietos antes de los 40.
Supongo que es momento de darle vuelo al área profesional. O porque el año que viene cumplo 30. Tal vez solo estoy melancólica porque Chris Evans ya tiene pareja... ni modo, no fue nuestro tiempo, él era libre, pero yo tenía pareja. Será para la otra jajaja.
De repente como que estoy y no estoy. ¿Será el encierro pandémico?
Cada día es peor, quiero escapar, correr sin rumbo y respirar sabiendo que me fui lejos lejos. Abrazar a quienes no están, la vida, ¿qué es lo que sigue ahora? Soy un mueble, artilugio medianamente funcional de 4 paredes, aquí hago todo, pero afuera no soy nada.
Me extraño, me extraño un montón, extraño la frescura de mi mente, extraño la sonrisa en el espejo, la mirada que esperaba algo más e imaginó el futuro con color. Vivo estancada, quiero subir, pero se acabaron los escalones, quiero correr pero ya no hay pista. No hice nada, aquí me perdí.
¿Ustedes cómo se sienten?
Au Revoir!!
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